Uno de los peligros más letales para tus plantas es el riego excesivo. Demasiada cantidad de agua puede llegar a pudrir las raíces y, por lo tanto, eliminar la capacidad de revivir de la planta. Como esta práctica se realiza por accidente muy a menudo, en Garden Ventura, tu centro de jardinería, hemos recopilado información básica sobre este tema.
Señales para identificar el exceso de riego
Cada planta tiene unos cuidados diferentes y una necesidad de riego distinta. Sin embargo, hay ciertos aspectos comunes que nos ayudarán a detectar que se está ahogando:
- No hay brotes de hojas nuevas, porque se siente incapaz de producir nueva vida. Se frena o retrasa el crecimiento.
- El suelo adopta un tono verdoso que indica la presencia de algas.
- La planta parece marchita. Esta señal es confusa y podríamos creer que le falta agua, pero podría ser justo lo contrario.
- Las hojas más jóvenes amarillean y se caen.
Ahora bien, si ya hemos detectado que nuestra planta sufre estos problemas debido al exceso de riego, ¿hay algo que se pueda hacer?
Recuperar la salud de plantas enfermas es posible
Hay que recalcar que si el daño ocasionado es mortal, ya no habrá nada que hacer.
En cambio, si continúa viva aunque esté enferma, podemos sacarla de la maceta con mucho cuidado. Después, la envolveremos en papel absorbente para intentar eliminar la humedad de la raíz. Tras 24h, la replantamos de nuevo y no la regamos durante unos días.
Esta acción permite arreglar el problema puntual pero debemos saber qué estaba causando la asfixia en primer lugar.
A veces ocurre que la maceta empleada no es la más apropiada porque no permite un correcto drenaje, aunque nuestra frecuencia de riego sea buena.
Si quieres que tu jardín luzca en su esplendor y evitar problemas de riego excesivo, contacta con Garden Ventura, tu centro de jardinería. Estudiaremos tus necesidades y te ofreceremos un plan personalizado para que disfrutes al máximo de tus espacios verdes.